Lo siento ~ William

Recuerdo del primer mensaje :

Asustada. Así me había sentido durante los últimos días. Llevaba días en esta habitacion sin salir y solo estando entre las sabanas de la habitación pensando y reviviendo momentos, como aquel en el bosque con William. Aquel que había desencadenado mi gran y absurda huida. Ahora que podía ver las cosas fuera de la situacion inicial sabía que habia echo mal. No debí haberme marchado y dejado a William así, sin ninguna explicación. Pero el miedo fue más fuerte que lo demás, y ahora me veía en la necesidad de verlo, de hablar con él. Necesitaba que estuviera conmigo, durante el tiempo que fuera necesario hasta saber si nuestro pequeño encuentro tendría su fruto o no. Le mandé un mensaje, prendiendo mi telefono por primera vez en días para encontrarme con mensajes y llamadas perdidas de mis hermanos y de William. Nada de Paul. Reí sin humor, Dottie tenía razón; Paul había huido incluso antes de poder escaparnos juntos.

Estoy en el hotel, necesito verte. Lo siento. Sky Fue lo único que escribí, esperaba que no sintiera rencor y decidiera venir. Si no, todo sería para peor y definitivamente no volvería al internado. Un despecho no era nada, dos y un posible embarazo era como la bomba de Hiroshima para mi corazón, un desastre irreparable.

Entonces cuando él dijo eso entré en razón. "Me pondré enorme" dije sorprendida al pensar que dentro de unos meses mi vientre pasaría de plano a enorme. "Seré una bola" dije casi llorando al saber que una vez que engordara William ya no me querría más y todo se iría por el caño. Me comencé a desesperar, pero luego pensé en lo segundo. Después de nueve meses tendríamos a nuestro pedacito de amor entre nuestros brazos y ya nada importaría.

No pudo evitar soltar una carcajada, el rostro de la joven, le hizo mucha gracia, sabía que le causaba conmoción, -calma, te veras hermosa, como siempre, eres la flor más bella del mundo- comentó aún riendo, no podía imaginarla así, pero sentía curiosidad de verla, de sentir a su bebé en el vientre de Sky, escuchar por primera vez, latir su corazón, -sabías que el corazón de nuestro hijo latirá por primera vez, a los 15 días de su gestación- comento de improvisto.

Lo miré curiosa "¿Cómo sabes eso?" le dije intrigada "¿Esperabas que estuviera embarazada antes de que me hiciera la prueba?" pregunté sonriendole dulcemente. Si ambos estabamos tan emocionados esto saldría perfecto, nada podría destruir la familia que estabamos por formar. Pensé en el ser que crecía en mi interior y sonreí, dentro de unos días su corazón comenzaría a latir.