Viendo el amanecer ~ Paul.

Por algún motivo no podía dormir, llevaba horas dando vueltas en mi habitación vacía ya que Maggie estaba perdida por ahí. Odiaba tanto estar sola por las noches, me hacía pensar. En Paul, en William... en los Port. En toda la situación.

Sabía que quería muchisimo a Paul, incluso podía decir amarlo pero ese amor comparado con lo que siento una vez que estoy con William se va por los cielo. En realidad todo se va, me quedó perdida en él. Me sentía egoísta por hacerle esto a Paul, pero no podía estar sin él .. era mi puerto seguro y lo quería.

Salí de mi habitación con sólo mi delgado pijama y salí al balcón donde me senté a esperar a que pasaran las horas. Escuché como alguien llegaba al balcón pero no presté atención hasta que me habló y me puso una manta encima. No me había dado cuenta del frío que hacía.

Había estado toda la noche dando vueltas por la ciudad, sin un rumbo fijo estaba cansado y solo quería meterme en la cama. No quería que nadie se enterase de aquel viaje para beber y pensar por eso subí por la fachada del balcón por una pequeña escalera donde las plantas se enredaban.

Cuando llegue al balcón no me lo pude creer parecía que Sky podía leer mis pensamientos y sabia que iba a subir por allí pero a quien iba a engañar ella estaría pensando en sus problemas, los que le daba yo.

-Hola-dije de forma suave porque la veía un poco adormecida. Me acerque a ella y puse una de mis manos sobre su hombro, parecía que estaba con la mente en otro sitio y con el cuerpo en aquel balcón.- ¿Quieres mi chaqueta?-la dije mientras me la quitaba, aunque no hacia casi frió no quería que ella se resfriara.

Escuché como me hablaba, lo miré y le sonreí. ¿Como podía ser tan egoísta? ¿Acaso el no se sentía utilizado por mi y mis estupidos planes? "Gracias" le dije colocándomela sobre los hombros. "¿Qué haces aquí?" le pregunté, "pensaba que aún estabsa en la ciudad" creí que sería en unos cuantos días más en los que llegaría junto a los demás, entre ellos William.

Me corrí para que se sentara a mi lado.

Lo bueno de Sky era que siempre me transmitía su naturalidad y cuando estaba junto a ella los dos éramos como uno solo. Ella era especial para mí, no podía decir que estaba enamorado de ella pero si podía decir que tenía algo en mi interior que nunca había sentido por nadie. Ella sabia que yo siempre estaría allí.

Me senté junto a ella y sonreí, puse mi mano sobre su pierna y la mire a los ojos-Sky, me fije en ti desde que te vi por primera vez tu estabas al final del pasillo y parecías que tenias el mundo a tus pies y yo solo era otro en la lista de chicos que soñaban contigo-me pare un segundo-pero me acerque, con valor y con fe y por eso estamos aquí, sabes lo que siento por ti pero yo no se lo que siente por mi-dije apartando la mirada y mirando a las estrellas.

Yo siempre estaría allí, era entupido y bueno con ella, no era un cerdo que se aprovechaba de ella. Por eso sabia que nunca podríamos estar juntos y que nuestra relación estaba llegando a su fin, pero yo tenia que remar a contracorriente para que ese momento nunca llegase.

No entendí lo que quería decir. Sus palabras me llegaron hasta el fondo de mi alma, y me supo a algo amargo. ¿Acaso se estaba despidiendo y dejando que esto terminara? ¡Eso no podía pasar!

"Paul" dije acercándome y acariciando su sedoso cabello "sé que lo que hago y lo que siento no te hace bien" dije y me pareció algo ambigüo " sabes lo que hay con William, pero en este momento eso no importa. Me importas tú, a pesar de todo y creo sentir lo mismo; no estoy segura" dije sintiéndome como lo peor. Yo no quería que esto terminara, llamenme egoísta o como quieran, pero Paul era todo para mí. Me mantenía en pie y me hacia sentir como si no hubiera mujer más especial que yo. "Dame la oportunidad para probarte que te puedo responder de la misma forma en que tu lo haces por mi" dije acercándome a su rostro. Me iría al infierno por esto, estaba actuando como la peor persona del mundo.

Todas sus palabras llegaron a lo mas profundo de mi alma, algo en mi decía aléjate, corre, márchate lo mas rápido que puedas pero mi corazón decía es ella, es la chica especial. Me aleje de ella y me acerque a la barandilla de piedra del balcón. Me subí encima mirándola directamente a los ojos.

-Si me dices que me tire me tirare, si dices que vuele volare-dije mientras sonreía-si me quieres luchare contra quien sea, seré tu guardaespaldas personal, tu mosquetero y tu caballero andante pero si no es asi me alejare entre la penumbra y no volveré-estaba totalmente serio, antes de reír y casi caerme al vació.-Joder la mierda que he tomado antes creo que me esta subiendo-dije antes de sentarme en la barandilla.-¿Quieres?

Yo la quería e iba a luchar hasta la muerte por ella, si me tenia que enfrentar a su familia a la mía o a William, lo haría pero como un caballero por el amor de su doncella.

Mi corazón dolió cuando se separó de mi para irse a la baranda del balcón. Miré como se subía y me paré, negando divertida a sus palabras. Jamás le haría daño, jamás le pediría que hiciera algo que no quisiera. Solo le pediría una cosa " Quédate conmigo" le dije mientras el me invitaba a la barandilla, pero me quedé ahí parada para quedar frente a él. "No te pediré nada más que eso" dije tomando sus manos y entrelazando nuestros dedos. Se sentía bien, se sentía ... correcto.

Estaba totalmente feliz, no se si era por la droga o porque sus palabras me gustaban y me hacia sentirme libre con ella.-Siempre estaré con tigo-dije mientras la cogia las manos y la obligaba a subir a la barandilla, era grande y si tenias cuidado no pasaba nada. –Como te voy a dejar, yo te quiero-dije antes de sacar una bolsita de mi bolsillo. Saque la pastilla y me la puse en la lengua y dije-Tómatela.
El cuelgue nos duraría hasta el desayuno y lo disfrutaríamos de lo lindo, no era la primera vez que tobamos algo. Pero esto era algo mas fuerte, no solo la pastilla sino eso lazo entre los dos, era como un pacto de los dos por siempre.

-Y después dime que sentiste el dia que me viste por primera vez, lo que pensabas y todo durara para siempre.

Sonreí ante sus palabras.

"¿Me quieres?" le pregunté sonriendo ampliamente mientras recibía la pastilla y me la tomaba. Tomé su mano mientras me acercaba y me acomodaba más cerca de él. Pensé en sus palabras. ¿Qué había sentido la primera vez que lo vi? Recordé.

Había sido el primer día de clases y yo sólo tenía quince, había sido hace tan solo un año atrás. Venía junto a mis hermanos mayores y con Caroline quien se había adelantado un año, cuando lo vi. Estaba apoyado contra los casilleros que estaban en el pasillo y me miraba fijamente. "Me avergoncé en un principio" dije riendo, recuerdo que parecía un pequeño tomate con su mirada insistente. "eras tan imponente con tu fachada de chico malo pero a la vez buena, que fue un flechazo. Caroline por semanas me molestó con que te hablara, pero luego me hablaste tú y nos volvimos amigos y luego ... bueno ya sabes el resto. Eres lo mejor que me ha pasado dentro de este horrible lugar, haces mis días más alegres y brillantes. ¿Se entiende?" pregunté riendo nerviosa, o tal vez eran las pastillas.

Yo la quería y quería pensar que ella también. Me baje de la barandilla y la ayude a bajar, los dos parecíamos estar a tono, al principio eran risas pero cuando empezara hacer efecto del todo nos volveríamos locos por nuestros instinto de diversión.-Me acuerdo perfectamente, cuando me acerque y te invite a saltarte las clases, ese día fue el primero, nuestra primera borrachera juntos, tu primera calada, nuestra primera resaca juntos y el primer coche que robamos-me quede pensativo-Eso creo que es de una película-me empecé a reír sin parar no podía parar.-Te acuerdas la primera vez que te lleve a los baños, nuestro lugar secreto, y bebimos entre clase y clase, fumamos hierva y nos besamos como idiotas que solo se deseaban el uno al otro.

¿Por qué reíamos? "¿robar un coche? Creo que si era una película amor" dije sonriendole. Y cuando recordé nuestra primera andanza. "Claro que lo recuerdo, y luego entraron unos chicos que se nos quedaron mirando raro y tuvimos que escapar al bosque porque venía la directora" dije, recordé las veces que habíamos echo lo mismo y un montón de otras cosas más. "aún nos besamos como idiotas que se desean" dije sonrojandome , a pesar de que Paul me conocía completamente aun tenia mis periodos de verguenza. " Hablando de eso, aún no me has saludado. Eres un mal novio" dije actuando enojo, aunque la risa no me lo permitía.

Ella era insoportable, no sabia como la podía aguantar. Si no me aguanto a mi mismo como podía soportar al ser más perfecto con el que me había encontrado durante toda mi vida. Me acerque a ella y puse mi mano en su cadera lentamente rozando su cuerpo con dulzura.-Hola-dije de forma seductora-A eso te referías cariño o a esto??-acerque mi mano a su cara y la abrí completamente mostrándola un colgante que la compre durante las vacaciones, nada nos podría separar.-Se que te gustan estas tonterías y lo vi y solo pude pensar en ti o en cambio te refieres a esto-me acerque lentamente a ella y la bese en la frente, no queria que todo fuese como siempre, yo siempre era el chico malo y ella la princesa, me apetecia que ella fuese la mala por un momento en su vida.

Miré el colgante que me había comprado era hermoso " ¿Me ayudas?" le dije dandome la vuelta y tomando mi pelo cosa que pudiera colocarlo. "Gracias es hermoso" dije poniendome en puntillas y besando su mejilla, casi en los labios. "En realidad no me refería a eso, pero si eso es lo que deseas" dije caminando devuelta al sofá en el que estaba en un comienza y recostandome completamente. Lo miré y le sonreí, las pastillas hacían su efecto y todo el sentimiento de tristeza y melancolía habian desaparecido.

Me acerque a ella y me tumbe encima de ella, solo quería besarla y estar cerca de ella todo el rato posible. Con el frió que hacia esos besos eran lo único que se podía hacer. Éramos dos enamorados que nos deseábamos el uno al otro. Ella era perfecta y para mi era todo. La di un beso en los labios lentamente notando sus labios contra los míos y como se unían perfectamente. Desde que nos conocimos hacia una pareja perfecta y estaba locamente enamorado de ella aunque en parte supiese que ella no estaba enamorada de mí. Pase mi mano por sus piernas mientras que la brisa golpeaba en nuestras caras. Todo me daba vueltas las pastillas habían hecho su efecto y los dos lo notábamos.-Te quiero-dije lentamente mientras la besaba

Se recostó sobre mi y me besó, pasé mis brazos por su cuello y acaricié su cabello suavemente mientras seguíamos con nuestro beso. Con una de mis manos acaricié su espalda suavemente sin romper el magnifico beso. Estabamos bajo el efecto de las pastillas pero no importaba, nada de lo que hiciera con Paul me traería arrepentimientos. "Lo sé" le respondí con una sonrisa contra sus labios "Yo también te quiero, lo sabes ¿cierto?" le dije sin dejar de besarlo y de acariciar su espalda y su cabello.

La bese lentamente antes de apartarme de ella, hacia mucho que no nos veíamos y quería que nos desfogáramos de forma especial, llevarla a divertir y ver en sus ojos que era feliz y que estaba enamorado de ella.-Lo se, se que me quieras-dije mientras miraba a sus labios, yo sabia que no me amaba o sus sentimientos no eran del todo verdaderos pero me gustaba ir junto a ella.-Te quiero y si no fuese por mi novia Miller-dije antes de partirme de risa-Se que te cae fatal y ya somos dos- dije antes de pasar mi mano por su rostro.-pero si quieres eso-me acerque a ella y me abalance para besarla con pasión y sentir su cuerpo contra el mió.-Yo te sirvo mi princesita, tus palabras son ordenes para este loco enamorado.

¿Por qué hablaba de Miller? La odiaba, no sólo por William sino por toda su estúpida competencia que tenía contra mi. Escuché en su voz la melancolía de saber que no estaba enamorada de él; pero el sabia que prefería dejar las cosas claras y no mentirle. Aunque ya había asumido que jamás estaría con William, no podía dañar a Paul sin estar segura de todo. Pero si el me pidiera que saltaramos juntos desde este balcón, lo haría. Me besó con furia, y pude sentir la pasión en el beso que me daba y dijo lo que no esperaba. Pero no pararía, lo extrañaba. Mi cuerpo lo extrañaba, sus manos, sus labios, sus abrazos. Como nuestros cuerpos se acomodaban y encajaban de forma especial. "Sabes que lo único que quiero es a tí" le dije comenzando a besarlo de forma desesperada.

La bese lentamente notando como todos los pelos de mi cuerpo se ruborizaban, si supiera lo que la quería se quedaría abrumada pero nunca lo sabría del todo. Me acerque más a ella poniendo mis manos sobre su rostro y acercándola al mió. Éramos pasión, furia y amor pero nos faltaba algo, nos faltaba una prueba de fe. Aunque ella dijese que mi amor por ella siempre duraría sabia que si William pasaba por delante suyo me dejaría por el y no lo iba aceptar me aleje un poco de ella.-Porque no hacemos que todos se jodan, te vistesy nos marchamos lo mas lejos posible, a la luna por ejemplo-dije antes de volver a besarla-Tu, yo, si quieres incluso Carol puede venir con nosotros y disfrutar de la noche o mejor dicho del amanecer entre música. Que te parece, ¿le decimos que te jodan al sueño y vamos a disfrutar?

Abrí mis ojos sorprendida, ¿hablaba enserio? "Con una condición" le dije besando su barbilla suavemente, me sorprendía como actuaba yo a su alrededor. "Que sea más lejos que la Luna, llevame a Venus y seré tuya por siempre" le dije y era una promesa. Mi madre me había dicho una vez; cuando tu cuerpo, tu mente y tu corazón sientan que lo que harás es correcto; lanzate. Vale la pena.
Si llegara William ahora y tuviera que escoger, nada me diría que me fuera con él. "¿Puedo preguntarte algo?" le dije, Paul era mi novio, mi amor, mi amigo. El me entendería ¿no? " Si William me amara no estaría con Tamara, si yo amara a William no estaría contigo. Lucharíamos contra todo y todos, pero no es así. ¿Eso significa que te amo?" pregunté y me avergoncé. Nunca había sentido nada igual por alguien, solo tenía 16 y ellos 18. La experiencia era mayor.

La mire a los ojos y sonreí, me acordaba de la primera vez que nuestro cuerpos se unieron en una danza de placer en su cama-Si tu estuvieran con William, lucharía sin descanso por ti, si William deja a Miller por ti me enfrentaría a el por ti, porque he descubierto que todo gira entorno a ti. –Tú me quieres, yo te quiero y nada mas existe porque somos tú y yo. Dos seres cargados de sentimientos que se buscan el uno al otro, yo te enseñe el mundo desde mis ojos y tu me enseñaste el significado de la palabra amor-dije antes de besarla lentamente.Mis palabras eran perfectas no sabia como me había salido pero me salieron-Coge tu ropa, vístete y salgamos a un After a disfrutar, despierta a tu hermana y vayamos los tres porque se que para ti lo primero es la familia y piensa que yo ya soy de esa familia.

Si no fuera por las pastillas y su efecto, habria llorado por sus palabras. Si, esto valia la pena. Saltaría por ti. " Te quiero" le dije besándolo por última vez antes de que levantara y me acompañara hasta mi habitación. La gemela malvada aún no llegaba y no me sorprendía. "Me visto y buscamos a Caroline" le dije levantandome de puntitas y besandolo, más bien rozando sus labios casi de una manera imperceptible. Caminé hasta mi armario y busqué unos jeans y una camiseta; rapidamente me saqué el pijama y la ropa interior para cambiarme. No me avergoncé, ya que Paul conocía mi cuerpo perfectamente así como yo conocía el suyo. Tomé un sweater y me voltee a mirarlo "¿Estoy bien así?"

Me quede con la boca abierta al verla de nuevo desnuda, me encantaba todas sus curvas su culo perfecto y en conjunto todo en ella. Me acerque y la bese-Estas perfecta pero siempre hay un pero¿no? vamos a divertirnos-dije mientras rebuscaba por la habitación-Esta mañana cogi la lista de habitaciones y vi que habia tocado con la gemela malvada, ponte su ropa, vamos a hacer locuras-me empeze a quitar la chaqueta y la camisa dejando mi cuerpo desnudo, me acerque al armario de Sky y la cogi un sombrero, me lo puse-Asi voy a ir yo, dando por saco a todos,¿ comprendes lo que te digo? di a la vida Fuck, a los demas, a todo el mundo menos a los que te importan y seras realmente tu.

Reí ante sus locuras. "Se me pegaran las pulgas amor" dije con un escalosfrío aunque sería divertido. Me saqué toda la ropa quedando solo en bragas y sujetador. "¿Qué tal si me paseo así?" dije girandome y sabiendo lo que le provocaba. El estaba casi desnudo y solo con un sombrero. "Eso es lo que amo de ti, vives sin que te preocupen los demás. En cambio yo sólo pienso en este estupido problema que me hace intentar ser la hija perfecta" le dije acariciando su abdomen suavemente y le besé sobre el, justo dónde latía su corazón.

Note como sus manos estaban en mi cuerpo y sentí como me subía la temperatura iba a terminar como siempre, en la cama, pero esta vez quería salir con ella.-A la chica perfecta dile Fuck, Fuck, Fuck y vuelvete como eres-dije antes de apartarme de ella.Me acerque a los cajones de la gemela malvada, empeze a sacar toda su ropa y a tirarla al suelo-Cuando regrese abra creido que lo hizo borracha-mire detenidamente su ropa-Que quieres algo descocado¿creo que no? Algo que deje a la imaginación, tampoco, creo que ya tengo lo que buscamos, en el fondo del cajón había las prendas mas ligeras que había visto en toda mi vida-Toma pruébatelas-cuando se las pase note que algo se caía al suelo, observe que era una bolsa con hierva, la cocí rápidamente y se la enseñe-Mientras caminamos hasta la ciudad digamos Fuck a la hierva y fumémosla.

Suspiré resignada, al parecer no lograría nada con Paul esta noche. Sólo beber y drogarnos para quedar muertos hasta el próximo mes. Mientras rebuscaba entre las cosas de Maggie me eché sobre mi cama solo en ropa interior, pensando en todo esto. Por un lado, estaba disfrutando con mi amor pero no recordaba como era cuando el estaba bien sin drogas o alcohol en su sistema. Tomé lo que había encontrado y me di cuenta que poco y nada dejaba para la imaginación. "¿Quieres exhibir a tu novia Miles?" le pregunté mientras me ponía un vestido que apenas tapaba mi trasero.